Masturbación: no hay nada que esconder
¿Cuántas veces has escuchado hablar de que las mujeres que se masturban son demasiado sexuales o que perdieron el interés por su pareja? ¿Por qué estimular la vulva o el clítoris se transforma en un secreto inconfesable?
En la sociedad patriarcal una mujer no puede pelear, no puede tomar el mando (y si lo hace es una histérica), no puede tener opiniones muy relevantes ni anunciar su sexualidad libremente (porque si no la califican de “puta”). En esta sociedad tampoco, obviamente, puede masturbarse… y si alguna lo hace… es por ninfómana, ¡pobre de ella! ¡no te le acerques!
Rompamos con el tabú
Masturbarse es algo natural que nos invita a conocernos y a entender nuestro cuerpo, ese lugar tan único y hermoso que tenemos que aprender a respetar, cuidar y, sobre todo, querer. El poder comprendernos a nosotras mismas individualmente nos hace estar mejor dentro de cualquier relación. Nos hace sentir libres de poder expresar lo que sentimos y pensamos, así como poder disfrutar al máximo cada momento de placer.
Los estereotipos que envuelven a la masturbación de las mujeres son inmensos, mientras que para los varones es algo de lo más “normal”, algo que pueden compartir con sus allegados libremente y sin ningún tipo de prejuicio. Sin embargo, como el placer de la mujer fue algo por siglos restringido y hasta eliminado de la existencia, se convirtió en algo prohibido, digno de ocultar y pecaminoso.
Defendamos el placer
No podemos dejar que esto siga así, que los cuerpos con vulva sean tomados como objeto de burla o de pornografía, como si solo existiéramos para darles placer a ellos (los varones cisgénero heterosexuales), como un objeto que no es capaz de sentir. Somos personas capaces de ejercer todo lo que los varones ejercen con la misma libertad. Y en este caso se trata de masturbación y sentirse bien con nosotras mismas.
Porque ni en clases de educación sexual, libros de biología o conversaciones coloquiales se habla de los muchos tipos de orgasmos y distintos puntos de placer que tenemos las mujeres. ¿Será hora por fin de poder ser dueñas de nuestro propio cuerpo y hacer lo que nos plazca sin recibir un castigo por ello?
Aprendamos a conocernos y querernos
Una vez, una pequeña versión de mí, asustada y con vergüenza, decidió ser libre y no hacer caso a lo que la sociedad decía. Decidió conocerse. Una persona que te puede acompañar durante este recorrido es Stevie Boebi, una youtuber que cuenta en sus videos (¡tienen subtítulos en español!) cómo tendría que ser una verdadera y amplia educación sexual, desde nuestra intimidad hasta con otros y otras.
Nunca te olvides, no estás sola y no sos rara, solo estás haciendo lo más lindo que un ser humano puede hacer: conocerte y quererte.
Rocío Techeira
Me apasiona la filosofía, si hay algo que no tolero son las injusticias. Amo leer, escribir y crear teorías en mi mente. Luego de entender que el feminismo me liberó, mi meta se convirtió en transmitírselo a los demás.