Sudor Marika: que tiemble la tierra de pibas con ganas
Hoy tengo ganas de contarte un poco de Sudor Marika, una de mis bandas favoritas, que va a estar cerrando este evento espectacular. Si no podés ir, ¡igual seguí leyendo! No te querés perder de conocer a esta gente increíble.
Sudor Marika es una banda de cumbia argentina como pocas otras. Combina letras feministas con una música que hace que los pies se te muevan casi solos. En sus propias palabras: “creamos imágenes, canciones y encuentros que interrumpen lo obvio, lo hegemónico. Alimentamos nuevos imaginarios, perturbando el establecido.”.
Con frases como “propagás el odio a los distintos”, «revolución es que te pueda besar en cualquier lado, sin sentir la vergüenza» o “si nos quieren bien sumisas, les daremos rebeldía” desafían la norma heterosexual, en tanto sus letras plantean siempre realidades disidentes y relativas a la diversidad sexual. Por otro lado, también se plantan frente a la hegemonía gay, empezando por el simple hecho de hacer cumbia (poco común en esta contracultura) y hasta incluir a tortas y personas que prefieren no definirse de ninguna manera. Buscan incomodar, hacer política con su arte, “musicalizar las luchas” con letras que reconecten con la militancia desde la alegría. “Apostar a un nombre como Sudor Marika, volver deseable esa nominación que suele ser despreciada, cada vez más, es una apuesta política.”
Actualmente cuentan con un álbum, Las yeguas del apocalipsis, que podés encontrar entero en YouTube, además de otras canciones y colaboraciones con otros artistas.
Nacimos moviendo las caderas,
fuimos quemadas en las hogeras,
nos dicen desviados y promiscuos,
también fuimos desaparecidos.
Aunque fue difícil elegir, te dejo una de mis canciones favoritas. Pero si te gusta, haceme caso y escuchá el álbum entero para que el viernes hagamos temblar la tierra de pibas con ganas.
Sofía 19 años y con la meta de cambiar el mundo. Mis días se resumen en dormir, estudiar y tomar mate. Escritora aficionada y amante del orden. Copada con escribir sobre género, sexualidad y todo aquello que me tenga harta.