Mis amigas, la celiaquía y yo
—Chicas, armé este grupo para poder organizar la comida de fin de año. Estamos todas, así que no hay excusas. El lugar ya está, ahora veamos el tema de la comida. ¿Qué hacemos: pizzas, hamburguesas?
—Pará, ojo: Luli es celíaca.
Luli, “la extraterreste”
Ya sea que te lo hayan diagnosticado de chica o que haga poco que lo sabés, muchas veces te habrás preguntado: ¿por qué a mí?
Cuando estás en casa es más fácil: podés buscar recetas, ver cómo preparar esas pizzas los sábados de noche o unas ricas tortafritas cuando llueve. Porque aprendiste que ser celíaca no es el fin del mundo. Lleva trabajo, mucho ensayo y error, pero al final siempre encontrás qué podés comer (y, sobre todo, la forma de que sea riquísimo).
Muchas veces lleva tiempo adaptarse a leer las etiquetas, a recordar las marcas aptas para consumir. Pero en algún momento pasa a ser parte de tu vida y lo hacés casi sin darte cuenta.
Pero cuando te juntás con tus amigas, todo es más complicado. La comida es la vedette de cualquier reunión… y, muchas veces, hasta la excusa para juntarse. Y cuando vas vos, todo gira en torno a qué puede y qué no puede comer Luli.
“Pero… ¿no podés comer nada?”
Esa y otras preguntas son las que escuchás y respondés miles de veces. Y capaz que en más de una oportunidad pensaste en dejar la dieta y comer todo sin medirte. Pero después vienen los malestares y la culpa. ¿Por qué es tan complicado?
Al mirar la vida de forma diferente, la comida ya no es el centro: juntarse, reír, hablar y bailar son los verdaderos motivos. Entonces, la comida pasa a ser secundaria y hasta prescindible: ese es el punto en donde todas en el grupo de amigas se van a sentir cómodas.
Hoy te presentamos: Las amigas de Luli
Ahora les hablo a ustedes, a las amigas de Luli. Son las amigas que cualquier chica quisiera tener. Cada vez que se juntan, piensan en todo, especialmente en qué puede y qué no puede comer Luli. Para estar con ella y entenderla bien, sus días felices y esos otros en los que está enojada con la vida, seguramente tuvieron que buscar un poquito qué es eso de ser celíaca.
Ser celíaca es tener una intolerancia total y permanente al gluten, una proteína que está presente en cuatro cereales: trigo, avena, cebada y centeno (grupo también llamado TACC).
En las personas celíacas, el gluten ataca la estructura normal del intestino e impide que los alimentos puedan pasar a la sangre. Por lo tanto, aunque esa persona coma todo lo que necesite, los alimentos no son aprovechados correctamente. Básicamente, la celiaquía implica que si una persona con esta intolerancia consume un alimento con gluten, va a sufrir de una mala absorción intestinal.
Los síntomas son numerosos y pueden variar de una persona a otra: pérdida de peso, retraso del crecimiento, alteración del carácter, distensión abdominal, deposiciones (o sea, caca) blandas, en cantidad y con muy mal olor, anemia ferropénica, pérdida del apetito.
Se puede decir que la “cura” de la celiaquía es el régimen estricto, sin TACC, y de por vida.
¿Qué podemos hacer como amigas?
El mejor consejo que te damos en Harta es vivir el DIA con Luli:
- D de dialogar: Hablar mucho con tu amiga; puede sentirse triste, con ganas de abandonar todo, y vos podés ser un pilar fundamental para que ponga en palabras todos los sentimientos que tiene y que le traen tanta preocupación.
- I de informarse: Conocer un poco más de la enfermedad, saber qué alimentos puede y no puede comer. Así, cuando surja una reunión, podés estar preparada y sorprenderla con algo rico para ella. A todas nos gustan los mimos.
- A de ayudarla: Cocinar juntas y aprender nuevas recetas, acompañarla a buscar nuevos lugares para salir a comer. Pero, por sobre todas las cosas, recordar que lo importante es estar, compartir, y el verdadero motivo de reunirse es celebrar que están juntas. ¡La comida es lo de menos!
Podés visitar estas páginas y grupos de Facebook para ayudarte en este camino:
- Jóvenes Celíacos del Uruguay (Grupo de Facebook)
- ACELU
- Soy celíaco, no extraterrestre (Canal de YouTube)
- Comunidad celíaca del Uruguay (también tienen Facebook y Twitter)
Ilustración: Ceci